En el horizonte, se empieza a divisar un leve haz de luz. La humedad noctura, queda patente todavía en el asfalto. Fresca es la hora de partida, pero no perezosa.... es hora de acariciar el mundo.
CRONICAS DEL TRAILERO RENEGADO
Las legañas se despegan de mi, dejo atras el caliente lecho. Una nueva eventura espera. La serpenteante pista de asfalto dibuja el recorrido hacia la emoción. Siento el caucho de mis gomas fundir bajo mi. Cada curva un mangazo percusivo, define el contorno negro de mi trazada, deslizando mi montura. El rugor del camino siento bajo mi bota. Gran aventura se avecina, siento el horizonte alcanzar.
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